Mientras el abogado de uno de los sospechosos por el asesinato de Matías Albornoz Piccinetti denunció que su defendido había sido agredido y que había recibido amenazas de muerte en el Instituto Roca, desde el ministerio de Desarrollo Social emitieron un comunicado para explicar que no hubo pelea.
“El domingo, cuando se recibían las visitas, hubo una gresca ocasionada por uno de los internos. Es un reincidente, es la tercera vez que está ahí; es una persona con un cierto grado de violencia. A mi representado no sólo le pegaron trompadas sino que además lo amenazaron de muerte, a él y su padre, que estaba allí”, acusó el defensor, Pablo Cisneros, quien representa a uno de los acusados por el crimen del adolescente. Se trata del involucrado que tiene 15 años. “Estamos en una situación en que hay tres menores internados, a quienes se acusa de un caso de violencia, y se los lleva a un lugar donde hay mucha más violencia”, se quejó.
Ante esa denuncia, el abogado agregó: “presentamos un hábeas corpus para que lo liberen. Esto pone en riesgo la vida de mi representado, no nos queda otra opción. Por suerte ya se dispusieron nuevos recaudos para que los tres menores puedan ser entregados a sus familias con algunas condiciones. Las vamos a cumplir porque tenemos la voluntad y porque estamos en la condición hacerlo. Sus padres son personas de conducta aceptable y moral intachable”.
“Sólo una discusión”
Tras estas acusaciones, el ministerio de Desarrollo Social emitió un comunicado en el que negó que todo lo relatado hubiera ocurrido.
“Se informa que, tras las versiones que aseguran que uno de los tres menores de edad acusados por el crimen de Albornoz Piccinetti fue amenazado de muerte y golpeado ferozmente en el Instituto Roca, donde se encuentra internado, sólo se produjo una discusión entre los internos, en la que el menor no recibió ningún tipo de agresión física”, se afirmó desde el Gobierno.
Atendido por un forense
En esa línea también declaró el director del Instituto Roca, Ernesto Sansierra. “No hubo pelea alguna, ni amenazas de muerte. Sólo una discusión en la que hubo un cruce de palabras. El menor fue atendido por un médico forense de la policía y se encuentra en perfectas condiciones físicas”, advirtió.
Ante la respuesta que se dio a conocer a través de los órganos de prensa oficiales, Cisneros se mantuvo en su versión: “es lo que me dijeron mis clientes, y hay otros menores que son testigos”.